jueves, 13 de noviembre de 2008



De cuando tenía tiempo de dibujar en la escuela y me daba miedo el tiempo. Creo que era el tiempo, en realidad no sé qué es lo que me daba miedo en ese momento. En fin, buenas épocas, principios del año pasado. No le puse fecha. Me gusta cómo quedaron los colores.

martes, 11 de noviembre de 2008


No sé si me gusta éste. O sea, algo me gusta, pero no sé si como gusta y ama uno lo que engendra, o porque de verdad me gusta. Tampoco sé si la parte de que no me gusta es porque uno se ve en lo que engendra y no se gusta del todo, y eso me pasa.
Perdón por tantos prefacios, es mi primera vez jaja (duele che!)
En fin, me guste o no acá está, :

Éso es lo peor:
que somos sus hijos,
los más herederos,
los que creemos que sentimos
y que tocamos y nos tocan
y pegamos y nos escupen
y reímos, y matamos.

Blasfemamos a nuestra madre
(a todas nuestras madres)
no porque la detestemos abiertamente
sino porque no la conocemos
y nos desconocemos

y así
damos más y mejores pruebas
de que es su sangre pobre y liviana la que nos llena las entrañas,
la que menstruamos,
porque no engendra
NADA:
vivimos anticonceptivamente,
esclavos de las enfermedades
que ellas inventaron para que no nos alejemos de su pollera;
para que nos repugnen y escandalicen
tanto que nos sometamos a ellas,
enfermedades y madres o enfermedades.
Con gusto.

Y para que no podamos lidiar
con lo que de verdad importa,
porque no sabemos qué importa
más allá del carnaval que pasa por la puerta de casa.

Y es que no hay nada,
más que nuestra madre satisfecha y blasfemada,
pero la desconocemos
sin poder matarla para cambiarla por otra
porque madre hay una sola.

Sólo podríamos cambiar a los hijos
que no engendraremos estériles,
o a nosostros mismos
pero estamos demasiado enfermos
por el médico de la familia que viene del carnaval.



Creo que es muy pesimista, o realista. No sé, pero no pega con el olor a verano que hay en la noche y las flores y la cercanía de las pseudo vacaciones próximas.

domingo, 9 de noviembre de 2008

acá vamos..

Qué miedo, tengo un blog. Ahora me van a conocer, o van a creer que me conocen, y yo voy a creer que me conocen, como si uno fuera lo que escribe, o lo que no muestra, o lo que le da miedo. Y así seguimos en la mentira pero desde un lugar con colores más bonitos, y fotos y videos y esas cosas pseudo lindas, porque, obvio, son desde acá atrás, sentada. Encima no termino de entender cómo se usa, mucho menos para qué sirve, ni sé cómo agregar a mis más mejores amigos. Pero acá estoy, y acá soy, (siempre me pregunté porqué en español los verbos ser y estar son diferentes, cuando en los demás idiomas siempre son un solo verbo, aunque no sea lo mismo ser que estar, lo dijo mi amigo Ale Sanz jaja) y eso. Ahora estoy en la parte coolta del sistema, qué bien. En fin, hola!